fue el sábado pasado. Los gritos de auxilio venian de lo interno de la manzana. Nos asomamos a la vereda y no pasaba nada, entramos al apuro de la incomprension giramos para volver, cerrar la puerta y atravesando el pasillo en lo alto del tapial un hombre tapado con una sabana blanca salta hacia el techo. Nosotros habíamos dejado la puerta abierta, pero el siguió de largo porque huia pero el malviaje te lo comés, y por eso a partir de esa noche decidimos cerrar la puerta,abierta la ventana de arriba de la puerta para la salida del gato hacia el patio. Pero la segunda noche hubo una incomunación absolutly y el gato entro a casa rengueando
desde ahi tomo vino y estoy a su lado, peleó con mi mamá por los costos del veterinario que necesito que ayude a solventar. que desidioso el sufrimiento ajeno y esto del lenguaje que el otro no capta, pero sabe, el bebé sabe que estoy a su lado,
obeso mórbido sanarás por este mantra
y nada más
mi novio y yo somos responsables iba a maullar para que le abramos puerta, o que iba a saber salir por esa ventana
chacal que mala pata todo esto
suena el principe idiota, dice fascinación delirio suspenso..
Unos poemas frescos 